martes, 23 de julio de 2013

VERÁN





... La gramática de la vida es confusa. Cada uno ordena los días y las historias con diferentes argumentos y teniendo en cuenta diferentes referencias. No sé Godard qué utilizaría para medir la vida, para dar un sentido a los días. Yo lo mido todo por estaciones, como si cada una de ellas fuera una coma, un punto, una separación necesaria. Sin embargo, para mí, el punto y aparte del año es el verano. Hace años, el final del curso escolar marcaba el inicio de las vacaciones de verano. Tiempo de cuadernos Santillana, del sopor del Tour de Francia y más tarde, de las fiestas, las copas y los bronceados en la playa para estar guapa. El verano siempre fue para mí una época de balance. Te daban las notas, pasabas –o no- de curso, intentabas que tus padres te compraran una bici nueva por las buenas notas y en definitiva: te hacías mayor y sabías que te estabas haciendo mayor. Desde que dejé el colegio y la universidad sigo teniendo esa sensación: que el verano es el final y el inicio de algo. Tiempo de hacer inventario, de amontonar las cosas que uno ha ido acumulando a lo largo del año en el trastero....
L. Ferrero

1 comentario:

  1. É certo que cada un mide a vida segundo as súas referencias...
    Os veráns sempre foron para mim un punto e aparte no tempo... Terminaba o curso, gardabas os libros ( un alivio e unha nostalxia) marchaban os amigos, a cidade quedaba deserta... O fastío dos paseos cos teus pais á caida da tardiña ( polo medio do día ía demasiada calor) por unha cidade deserta (a xente emigraba ás praias)
    Agora que xa non hai cursos que rematar, nin libros que gardar, que a praia está á volta da esquina...O sol segue a espir as rúas, a nostalxia volve a ocupar os recunchos do corpo, visteste coa túa sombra... E aló pola tardiña afogas as túas fantasmas nun vaso de cervexa...

    ResponderEliminar